sábado, 23 de abril de 2011

Oviedo, Punto de Encuentro

El camino nos llama todos los años por estas fechas y no nos quedó más remedio que determinar cuál sería nuestra ruta de este año.
 Dado que hay muchas alternativas y ya hemos completado el francés en su totalidad, desde Saint Jean de Pied de Port hasta Muxía, y también el aragonés (Somport-Puente de la Reina), con la gloriosa extensión del japonés Kumano Kodo, está claro que quedan muchos caminos disponibles hasta que no haya más remedio que confinarnos en un geriátrico o nos toque marcharnos de este mundo.
Sin mayores problemas optamos por dejar para 2012 el francés, en Francia, desde Le Puy en Velay  (en la foto, para abrir boca y visualizar nuestro punto de partida) hasta Conques.
Así que decidimos encarar este año la senda mayormente asturiana del Camino Primitivo, de la que teníamos como principales referencias sus extraordinarios paisajes y un trazado particularmente complicado con mucho rompepiernas y algunas tachuelillas fastidiadas. 
Damos fe de que pudimos experimentar ampliamente ambas características.
Esta vez caminamos catorce personas. Diez se incorporaron el primer día y cuatro en la noche del domingo, en Grado, tras la etapa inicial, que no sabemos si con cierta intención, se ahorraron, ya que resultó algo difícil y la única con lluvia de toda la semana. Paco, lamentablemente, quedó fuera pero confíamos que en algún momento (más pronto que tarde) pueda reincoporarse. 
Se le echó de menos pero disfrutamos con su aparición en Pola de Allande, en la visita a la presa de Grandas de Salime y también en la cena final de Lugo. Pepe de nuevo tuvo que traballar polo país y dejó pendientes todas las etapas, aunque estuvo igualmente en Lugo. Como él, Marien, Manolo y Quique, en su honrosa calidad de parejas de caminantes.
De Vigo salimos el sábado 23 de abril siete de los paseantes (Irache, Porota, Jaime, Álvaro y Beni más Ana y Juanma). En la foto faltan Porota y Alvaro.
En Ourense se incorporó O’Neill
y por la noche aparecieron en la catedral de Oviedo Alfonso y Feli procedentes de Burgos.
Las siete horas en bus desde Vigo fueron un poco pesadas pero esta alternativa nos permitió prescindir del coche. De la tarde en Oviedo poco hay que contar.
Un día agradable en una ciudad recoleta con enorme encanto en  una jornada de sábado santo con mucha people por las calles.  

Nos dedicamos a pasear, tomar cañas, cenar muy bien de tapas en una sidrería de la calle Gascona y  dar una vuelta por la zona comercial.
Hicimos la consabida visita a Woody Allen, al que algún desaprensivo arrancó las gafas hace tiempo.




y a La Regenta 
También observamos detenidamente un gran culo obra de Eduardo Urculo.

La gran suerte es que como transportamos nuestro ajuar completo en la mochila, cualquier compra estaba descartada.
En el hotel Etap, sencillo pero funcional (justo lo que necesitábamos para una parada como la nuestra) y con un personal de lo más amable, resolvimos el alojamiento y el desayuno dispuestos a iniciar la ruta a la mañana siguiente. Eso sí, no muy temprano. Está visto que la vieja disciplina talibana es ya un recuerdo del pasado………como se comprobó a lo largo de todo el camino.

1 comentario:

  1. Solo me queda una duda: Si Eduardo Urculo hizo un culo gigante...¿qué habría hecho de llamarse Eduardo Urteta?

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